La SNCF y el fabricante alsaciano Lohr han presentado un nuevo tren llamado Draisy. El objetivo de este vehículo eléctrico de batería es dar nueva vida a las pequeñas líneas rurales, la mayoría de las cuales están amenazadas.
El tren Draisy, con su característico morro cuadrado y su diseño futurista, se implantará próximamente en toda la región de Grand-Est. Su objetivo es convertirse en «un tren para el campo» y revitalizar las líneas ferroviarias rurales. Con sus 80 plazas (30 de ellas sentadas), el Draisy, que funciona con baterías eléctricas, presenta una serie de ventajas.
«Estas líneas cortas tienen muy poca electrificación, así que tuvimos que idear una solución autónoma. Es un tren muy ligero, de menos de 20 toneladas, y muy corto, de 14 metros, como un autobús. El objetivo es dañar menos la vía férrea para ahorrar dinero», dice Julien Rat, Director de Operaciones Ferroviarias de Lohr.